jueves, 16 de febrero de 2012

Para casa

Tardaron en darnos el informe de alta, ese día estaban liados, yo ya estaba requetevestida con un vaquero que me hacia daño cuando me sentaba porque la cintura, que siempre había sido inofensiva, de repente se me clavaba en la barriga que tenía hinchada por la intervención y llena de moratones por la heparina que me pinchaban cada día y que resulto que me tenía yo que seguir pinchando ya en casa.A mi  me daba igual, yo me iba para casa. Todo estaba casi acabado.
Mi cirujano, el optimista, nos había dicho que la operación había ido muy bien y había quedado todo muy limpio. ¡Que bien!, el miedo empezó a disiparse, solo mi hermana pequeña me preguntaba por la biopsia, yo le repetía lo que nos habían dicho, que tardaba algunos días pero que el cirujano optimista había dicho que todo había salido bien y que estaba limpia.
La recuperación fue pesada, no iba bien al baño (ni todavía voy) pero cada día estaba mejor, mi barriga estaba llena de morados y de puntos, a la semana me volvió a ver mi cirujano y como siempre optimista además de quitarme los puntos me dio hora de revisión para un mes y pico más tarde, yo le pregunte si me llamarían si la biopsia iba mal y él volvió a insistir en lo bien y en lo limpio que había quedado todo.
"Bueno, pues él sabrá, si me ve en más de un mes buena señal" pensaba yo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario